Tienes problemas de visión y necesitas lentes correctivos, y entre tantas ópticas, farmacias y tiendas que hay por ahí, no sabes dónde comprarlos.
Pues bien, en primera instancia debes acudir a un buen centro oftalmológico donde te revise un buen médico oftalmólogo, para que te indique el tipo de lentes correctivos que realmente se ajusten a tu necesidad visual.
El siguiente paso será encontrar una montura bonita que vaya en armonía con tu tipo de rostro, sin embargo, debes tomar en cuenta que no todos los lentes correctivos se ajustan a todo tipo de monturas.
¿Qué tipo de lentes necesitas?
Gafas, anteojos y lentes, aunque técnicamente son términos diferentes, el uso hace la norma y hoy día son considerados como sinónimos.
Existen muchos tipos de lentes correctivos, están aquellos que van unidos a un armazón llamado montura que se sujetan a las orejas por dos varillas, aquellos que se colocan directamente en el ojo como los lentes de contacto y los lentes intraoculares que sustituyen al cristalino opaco del ojo, causado por la catarata, y se colocan a través de una cirugía.
Ahora bien, de los tipos antes mencionados se desprende una gran variedad de lentes en función de cubrir las patologías oculares, necesidades y gustos de los pacientes.
- Anteojos de monovisión: son lentes diseñados para ayudarte a ver, ya sea de cerca o de lejos.
- Anteojos bifocales o multifocales: corrigen tanto la visión de cerca como la visión a distancia, todo en el mismo lente.
- Anteojos progresivos: básicamente realizan la misma función que los multifocales, con la diferencia de poseer una transición suave que sustituye las líneas divisorias visibles entre la visión de distancia y la visión de cerca.
¿Cuál material es el más adecuado?
Anteriormente los lentes correctivos solían elaborarse en vidrio, sin embargo, hoy en día en su mayoría se fabrican de plástico.
Aquí encontrarás detallado algunos de los materiales más usados, de acuerdo a la necesidad visual que tenga que cubrir el paciente con sus lentes correctivos.
- Lentes plásticos: son más livianos, ligeros y seguros ya que tienen menos posibilidades de romperse.
- Lentes de policarbonato: tienen una alta resistencia al impacto, son indicados para niños, personas que necesitan gafas durante deportes u otras actividades.
- Lentes trivex: cumplen la misma función de seguridad que el policarbonato, con la salvedad de generar menor distorsión.
- Lentes de alto índice: recomendados para altas dioptrías, es decir para personas que necesitan alta corrección visual, este tipo de lentes tiene un perfil delgado y disminuye la apariencia de fondo de botella.
- Lentes de vidrio: duran más que los plásticos pues no se rallan con la misma facilidad que los otros, pero es más fácil que se rompan.
Por otra parte, sea cual sea el material utilizado para elaborar los lentes correctivos, existen recubrimientos protectores para los mismos, que te ayudarán a mantener tus ojos lo más sano posible.
Los recubrimientos antirreflejos previenen la fatiga ocular y el destello de luz, los ultravioletas (UV) protegen los ojos de la radiación nociva del sol, los fotocromáticos que se ajustan automáticamente según la exposición de luz que reciba.
Como te pudiste dar cuenta, para la corrección de los defectos visuales la óptica se vale de muchos tipos de lentes correctivos, que van en función al tipo de material utilizado en su fabricación, sus características ópticas y el tipo de problema visual que se debe corregir.
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